- Aunque el español Jon Cintado Arteche cayó en la final ante Woo-hyeok Park, su hazaña de llegar a la Final del Campeonato Mundial de Taekwondo, en la categoría de -80 kilos, fue celebrada en Bilbao.
“No quería despertarme por si todo era un sueño”, declaró el taekwondista Andoni Cintado al diario El País durante la mañana de este martes 15 de noviembre, mientras recordaba su hazaña en el Centro Acuático Metropolitano.
No es para menos, si se trata de su primera gran competencia internacional para este vasco de 23 años que se ganó el reconocimiento del público tapatío y llegó de manera poco esperada hasta la final de la división de -80 kilos.
Y es que en el camino se encontró ante lo mejor de lo mejor: primero fue el jordano Saleh El-Sharabati, plata en Tokio 2020; le siguió Seif Eissa, de Egipto, y bronce en la misma justa olímpica, y el sorprendente pase a la final lo logró ante el griego Apóstolos Telikostoglu, segundo lugar del anterior mundial de Tae Kwon Do celebrado en Manchester,Inglaterra, en el 2019.
Pese a que no pudo hacer lo propio contra el coreano Park Woo-Hyeok, sus amigos, familiares y compañeros de equipos que siguen desde España el Campeonato Mundial de Taekwondo, no dudaron en expresarle su cariño y admiración, principalmente en Facebook.
Licenciado en ingeniería de diseño industrial, Andoni consiguió su segunda medalla internacional, luego del bronce en el Campeonato Europeo Sub 21 realizado en 2019, en Helsingborg, Suecia.
Radica en Valencia, donde se inscribió en el Deportivo Olimpo y después fungió como sparring de los atletas olímpicos hasta que Miguel Ángel Herranz, responsable de la selección masculina española de Taekwondo, optó por llevarlo al CAR de Madrid, donde ingresó apenas el año pasado.
Luego de un año de trabajar, cursar un máster en administración de negocios, debió hacer un espacio para llegar a Guadalajara, y de nueva cuenta requirió del apoyo de sus padres.
“Estaba bastante metido en las prácticas de empresa, en dos empresas de Valencia, formalizando mi situación laboral. Mi filosofía siempre ha sido: disfrutar, disfrutar, disfrutar. Pero llegó un punto en que ya no podía ir a mi jefe cada dos semanas y decirle: necesito cinco días porque tengo el Open de Bulgaria”, agregó Cintado en la entrevista con El País.
Ya como subcampeón del Mundo, este chico español seguirá festejando, pues asegura que su deporte es muy fugaz y el siguiente año, así como apareció él, prácticamente de la nada, puede llegar otro desconocido y quitarle su puesto.
