A pesar de la pérdida de rentabilidad y los estragos causados por la sequía de 2023, Jalisco se mantiene como el segundo estado productor de carne en canal a nivel nacional, con más de 200 mil toneladas, solo por debajo de Veracruz.
José Antonio Ruelas Pérez, presidente de la Unión Ganadera Regional de Jalisco, reconoció que cerca de una cuarta parte de los ganaderos de la entidad han dejado la actividad, presionados por los bajos márgenes de ganancia y la competencia con otros cultivos más rentables.
“Ya se ha estado comentando que los hatos ganaderos aquí en el estado bajaron considerablemente con la sequía del 2023, que se extendió hasta mediados del 2024, pues muchos decidieron vender sus vacas y otros emigraron a la renta de los ranchos”, explicó.
Ruelas Pérez señaló que el alquiler de tierras para siembra de agave, berries u otros cultivos ha sido más rentable que mantener ganado, lo que provocó una reducción en los hatos de hasta un 30 por ciento. “Hay municipios que hasta en un 50 % disminuyeron”, aseguró.
La actividad ganadera en Jalisco continúa siendo un sector de peso, con un valor económico estimado en 133 millones 452 mil pesos al cierre de 2024. La Unión Ganadera Regional agrupa a más de 104 mil productores registrados ante el Gobierno del Estado.
En respuesta a esta situación, el gobierno jalisciense ha implementado apoyos por 12.5 millones de pesos para impulsar la actividad. Entre ellos, destacan incentivos por $25 mil pesos por semental, la entrega de 100 vaquillas —tres por productor— y un monto adicional de $10 mil pesos por beneficiario.
“No es una cantidad grande, pero ayuda, ayuda, y los mismos productores, al ver que los precios están buenos, pues van”, comentó el líder ganadero.
Con información de Juan Carlos Huerta Vázquez.