El rugido de un motor y la fuerza de un tractocamión no son exclusivos de los hombres.
Aunque en México solo el 1.5% de los operadores registrados en la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes son mujeres, esta cifra está en ascenso. Así lo asegura Mary Gutiérrez, empresaria y consultora en autotransporte, quien no solo impulsa la incursión femenina en esta industria, sino que ella misma sabe maniobrar un camión de carga con remolque.
“Tenemos un gran reto, pero las mujeres están ganando terreno. Existen programas de capacitación y las empresas están abriendo espacios para ellas”, destacó Gutiérrez en entrevista para Jalisco TV.
Uno de estos espacios es la “última milla”, el sector del comercio electrónico en el que conductoras transportan paquetes en jornadas de ocho horas, permitiéndoles compatibilizar el trabajo con otras actividades. Sin embargo, también hay iniciativas que buscan capacitar a más mujeres para operar vehículos de carga pesada.
“Les doy una primicia: en Jalisco se lanzará un programa de capacitación impulsado por la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), con el objetivo de preparar a más mujeres operadoras. Además, el Instituto de Capacitación y Formación para el Trabajo (IdeFT) en Tlajomulco cuenta con una pista de rodamiento para entrenarlas y otorgar licencias tipo B”, reveló la consultora.
Pero la inclusión no solo requiere formación, sino también condiciones laborales equitativas y seguras. “La seguridad es un reto, porque el robo de mercancía es constante. También es necesario contar con más baños y espacios adecuados en los paraderos para ellas”, agregó Gutiérrez.
Sobre el machismo en el sector, aseguró que las empresas están adaptándose bien: “Los empresarios quieren contratar mujeres porque son cuidadosas con sus unidades y cumplen con la documentación necesaria”. No obstante, la brecha salarial sigue presente, aunque se están tomando medidas para reducirla.
La industria del autotransporte en México está en transformación. Más mujeres están al volante y, con programas de capacitación y mejores condiciones laborales, la carretera hacia la igualdad avanza con paso firme.