- Se relaciona con el Parkinson, ELA y esclerosis múltiple, o con daños cerebrales o tumores de cabeza y cuello.
El 12 de diciembre se conmemora el Día Mundial de la Disfagia, un trastorno que implica problemas para tragar alimentos y líquidos de forma normal. Se trata de una condición que afecta a una parte significativa de la población y que requiere de la intervención urgente de un especialista.
La disfagia es un trastorno que impide tragar adecuadamente los alimentos o los líquidos, debido a una lesión o alteración neurológica que afecta la boca, la faringe, la laringe o el esófago.
Los síntomas de la disfagia pueden incluir dolor al deglutir, dificultad respiratoria y riesgo de desnutrición.
Causas
Puede tener varias causas, como la acalasia, que impide la relajación del esfínter esofágico o la contracción involuntaria o la tumoración del esófago. Es más común en personas mayores que ingieren alimentos demasiado grandes.
Síntomas
- Dolor o incomodidad al comer.
- Sensación de que los alimentos se quedan atascados en la garganta o el pecho.
- Ronquera de voz.
- Regurgitación, es decir, que los alimentos vuelven a la boca.
- Ardor de estómago.
- Tos.
- Pérdida de peso repentina.
Tratamiento
Para abordar este trastorno, se recomienda modificar la alimentación con una dieta menos sólida y más líquida, pero con cierta consistencia.
La gelatina es un alimento que facilita la deglución y aporta vitaminas y proteínas, para que la persona conserve un peso adecuado y no pierda masa muscular.
Si el trastorno se debe a enfermedades graves como tumores, estenosis esofágica o cáncer, se requiere la atención de un especialista que indique el tratamiento adecuado o, en caso necesario, la cirugía.