Donald Trump declaró hoy que México es “un lugar peligroso y gobernado por cárteles“, en sintonía con su discurso –y de los republicanos– para mantener el enfoque sobre México, inmigrantes y otros “enemigos externos” que justifique el camino que tomarán cuando regresen a la Casa Blanca el 20 de enero, todo en el contexto de la aprobación en la Cámara de la Ley Laken Riley, la cual autoriza el encarcelamiento de inmigrantes indocumentados que cometen delitos no violentos para proceder a su deportación.
Esta ley, que fue nombrada por una mujer asesinada en Georgia por un venezolano indocumentado, se presentará a votación ante el Senado el viernes, donde se espera será aprobada.
“México está realmente en apuros, muchos apuros, es un lugar muy peligroso”, comentó Trump en conferencia de prensa en su club de Mar-a-Lago en Florida, señaló que el país está “esencialmente gobernado por los cárteles“. También señaló al gobierno de México por permitir que “millones de personas” y cantidades récord de drogas ingresen a su país.
Luego de repetir su amenaza sobre los aranceles “muy serios” que impondrá a México y Canadá si no acatan sus exigencias, Trump también anunció que cambiará el nombre del golfo de México por “golfo de América”.
Niegan vínculo entre migración y delincuencia
Luego de que 48 diputados demócratas se sumaron a los 218 republicanos que aprobaron el proyecto de ley que permitiría la detención de migrantes el National Inmigration Law Center criticó a quienes votaron por ese proyecto, al afirmar que “la Ley Laken Riles es una manifestación de política cínica.
El organismo defensor de los derechos de los migrantes expresó que la mayoría está manipulando una tragedia personal para culpar inmigrantes. En realidad, no hay correlación entre condición migratoria y criminalidad.
“Este proyecto no es una medida de seguridad pública, sino un ataque sobre protecciones constitucionales establecidas que lograran nada en mantener seguras a las comunidades si es promulgada en ley”, concluyen.
