Customise Consent Preferences

We use cookies to help you navigate efficiently and perform certain functions. You will find detailed information about all cookies under each consent category below.

The cookies that are categorised as "Necessary" are stored on your browser as they are essential for enabling the basic functionalities of the site. ... 

Always Active

Necessary cookies are required to enable the basic features of this site, such as providing secure log-in or adjusting your consent preferences. These cookies do not store any personally identifiable data.

No cookies to display.

Functional cookies help perform certain functionalities like sharing the content of the website on social media platforms, collecting feedback, and other third-party features.

No cookies to display.

Analytical cookies are used to understand how visitors interact with the website. These cookies help provide information on metrics such as the number of visitors, bounce rate, traffic source, etc.

No cookies to display.

Performance cookies are used to understand and analyse the key performance indexes of the website which helps in delivering a better user experience for the visitors.

No cookies to display.

Advertisement cookies are used to provide visitors with customised advertisements based on the pages you visited previously and to analyse the effectiveness of the ad campaigns.

No cookies to display.

TEJUINO: SABOR Y TRADICIÓN QUE CELEBRA TRES AÑOS COMO PATRIMONIO DE GUADALAJARA

Compartir esta nota:

Tiempo de lectura:

20 de marzo de 2025

Guadalajara es poseedor de una vibrante escena culinaria, y prueba de ello es el Tejuino, una de las bebidas más emblemáticas de Jalisco y que recientemente celebró su tercer aniversario como Patrimonio Municipal. Esta bebida fermentada de maíz y piloncillo, de sabor refrescante y profundo, ha conquistado paladares tanto locales como visitantes, manteniendo viva una tradición que ha pasado de generación en generación.

Leonardo González, uno de los vendedores de esta icónica bebida en Guadalajara, ha estado en el negocio por más de 10 años. Con su puesto en el cruce de Juan Álvarez y Andrés Terán, comparte con entusiasmo los secretos de su receta. “La madre base viene siendo la masa de maíz. La preparación comienza al hervir agua con piloncillo, un proceso lento en el que la mezcla toma forma. Cuando empieza a hervir, se añade la masa diluida en agua para obtener un atole. Luego se apaga el fuego y se deja reposar para después fermentar con cáscara de piña”, comentó Leonardo.

El proceso de elaboración requiere paciencia y tiempo. Para lograr la fermentación adecuada, el tejuino necesita reposar entre cinco días y una semana. Esta fermentación es esencial para lograr el sabor auténtico que tanto gusta. Antes de servir, el tejuino se enfría para garantizar su frescura máxima, y al momento de disfrutarlo, se le añade una pizca de sal, hielo y nieve de limón, creando una bebida única que es tanto un refresco como una tradición.

Cada vaso de tejuino representa más que una bebida: es un tributo a la cultura tapatía, una delicia refrescante y un símbolo del mestizaje que define la gastronomía local. Es, sin duda, un sabor que celebra el tiempo y la dedicación de los productores, y una tradición que continúa ganando reconocimiento, siendo parte de la esencia misma de Guadalajara.

Con información de Mabel Anaya Ortega.



Comentarios

Te recomendamos


Recibe las ultimas noticias en tu correo