El presidente de Colombia, Gustavo Petro, mencionó a la “mafia con asiento internacional” como posible responsable del atentado contra un senador opositor y aspirante a la presidencia del país.
Las autoridades buscan a los autores intelectuales del ataque del sábado contra el legislador Miguel Uribe, miembro del partido de derecha Centro Democrático. El político de 39 años recibió tres impactos de bala, dos de ellos en la cabeza, y está en cuidados intensivos.
Una “hipótesis” es que “el autor del atentado sería la mafia con asiento internacional”, escribió Petro al filo de la medianoche del lunes en la red social X.
Hay “indicios muy fuertes que han llegado a dirigentes muy altos de la oposición” y el oficialismo, dijo.
Un menor de 15 años fue capturado el sábado como sospechoso de disparar contra Uribe.
El senador sigue en “estado crítico”, aseguró la clínica en la que se encuentra hospitalizado en el último parte médico divulgado el martes.
Petro anunció que ordenó reforzar la seguridad de altos dirigentes de la derecha como el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010).
El influyente exgobernante denunció el lunes que conoció por parte de “inteligencia internacional” de un supuesto plan para atentar en su contra.
Si la mafia está detrás del crimen, posiblemente se debe a que el gobierno ha “golpeado durísimo” al narcotráfico, aseguró Petro.
El presidente denunció que el día del ataque la custodia de Miguel Uribe fue reducida “extrañamente” de siete a tres escoltas.
En día previos, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, mencionó otras líneas de investigación para determinar las razones del atentado.
Una es que se trató de un mensaje contra el Centro Democrático, partido que busca recuperar el poder en las elecciones presidenciales de 2026.
Otra es que se trata de un intento de “desestabilizar” al gobierno de Petro, a quien sectores de la derecha acusan de incitar el odio contra la oposición.
La fiscal general, Luz Adriana Camargo, informó el lunes que si el adolescente sospechoso es hallado culpable podría pasar ocho años privado de la libertad.
Camargo explicó que posiblemente no conoce quién ordenó el crimen y simplemente fue contratado por una “red sicarial”.
El joven fue baleado en una pierna antes de ser capturado por guardaespaldas de Uribe. La fiscalía aguarda que se recupere de las heridas para interrogarlo.
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