Customise Consent Preferences

We use cookies to help you navigate efficiently and perform certain functions. You will find detailed information about all cookies under each consent category below.

The cookies that are categorised as "Necessary" are stored on your browser as they are essential for enabling the basic functionalities of the site. ... 

Always Active

Necessary cookies are required to enable the basic features of this site, such as providing secure log-in or adjusting your consent preferences. These cookies do not store any personally identifiable data.

No cookies to display.

Functional cookies help perform certain functionalities like sharing the content of the website on social media platforms, collecting feedback, and other third-party features.

No cookies to display.

Analytical cookies are used to understand how visitors interact with the website. These cookies help provide information on metrics such as the number of visitors, bounce rate, traffic source, etc.

No cookies to display.

Performance cookies are used to understand and analyse the key performance indexes of the website which helps in delivering a better user experience for the visitors.

No cookies to display.

Advertisement cookies are used to provide visitors with customised advertisements based on the pages you visited previously and to analyse the effectiveness of the ad campaigns.

No cookies to display.

LA ALIMENTACIÓN Y SU RELACIÓN CON LAS EMOCIONES

Compartir esta nota:

Tiempo de lectura:

07 de enero de 2024

  • La psicopedagoga Daniela Hernández Navarro recomienda enseñar a los niños a amar su cuerpo para tener un acercamiento más saludable a los alimentos.
  • Destaca que la alimentación es un mecanismo por el cual se procesan las emociones.

De acuerdo con la psicopedagoga Daniela Hernández Navarro, la alimentación es un mecanismo por el cual se procesan las emociones. La lactancia, por ejemplo, es el primer vínculo de seguridad de un individuo. Al momento de consumir un alimento se tienen connotaciones positivas o negativas, según sea la experiencia y lo que remite.

Hernández menciona que es importante diferenciar el hambre física de la emocional y, aunque la tendencia es comer sin emoción, es imposible deslindar esta cualidad de la alimentación diaria. La propuesta saludable es regresar a comer como los niños: sin restricciones, reglas o conteo de calorías.

Te puede interesar:

La experta destaca que nadie nace odiando su físico, pues es una conducta aprendida. Recomienda que los padres enseñen a sus hijos a amar y respetar su cuerpo para que así puedan llegar a tener una mejor relación con la comida y hábitos más saludables.



Comentarios

Te recomendamos


Recibe las ultimas noticias en tu correo