Con temperaturas al alza y la temporada de estiaje en puerta, los brigadistas forestales de Jalisco se preparan para enfrentar uno de los periodos más exigentes del año: el combate a incendios forestales. Un trabajo tan indispensable como riesgoso, que muchas veces consiste en reparar el daño causado por manos descuidadas o deliberadamente irresponsables.
Antonio Aguayo, segundo oficial de la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos Jalisco, advierte que la labor de los brigadistas no solo implica apagar el fuego, sino enfrentar condiciones extremas y adentrarse en zonas de difícil acceso.
“Son incendios que nos provocan en áreas lejanas a las zonas urbanas o donde no hay caminos. En ocasiones nuestro personal camina hasta seis horas para llegar a iniciar el combate, porque no hay rutas de acceso ni forma de llegar con los vehículos”, explicó el oficial, perteneciente a la División Forestal de la corporación.
Tan solo de enero a la fecha, la unidad ha atendido más de 825 incendios forestales en distintas regiones del estado. Sin embargo, Aguayo advirtió que lo peor aún no llega. La temporada crítica está por comenzar y se extiende de abril hasta junio, coincidiendo con la llegada de las primeras lluvias.
Durante esos meses, los brigadistas pueden llegar a combatir hasta 30 incendios diarios en todo el estado.
La Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos Jalisco hace un llamado a la ciudadanía a evitar el uso de fuego en áreas naturales, no tirar colillas de cigarro, evitar fogatas y denunciar a quienes provoquen siniestros de manera intencional. Cada incendio no solo pone en riesgo al medio ambiente, sino también la vida de quienes arriesgan todo para apagarlo.
Con información de Jaime Alberto Tinoco