Trabajar como oficial vial implica responsabilidad, concentración y empatía con las necesidades de los ciudadanos. Para Diana Alvarado, supervisora en Guardianes Viales de Zapopan, su labor representa una entrega total al servicio público.
“Mi labor es supervisar los 21 cruceros más conflictivos por el momento. Hay horarios de trabajo que inician desde las 5:30 a.m. hasta las 9:00 p.m.“, explica Alvarado, quien cuenta con más de siete años de experiencia en el campo y ha participado en talleres de resolución de conflictos y manejo de emociones.
El trabajo de los Guardianes Viales no solo implica regular el flujo vehicular y garantizar la seguridad de peatones, sino que también los enfrenta a las inclemencias del clima y a comentarios de la ciudadanía, algunos de ellos despectivos por razones de género.
“Sí me ha tocado que algunas personas, sobre todo hombres, dicen ‘es mujer’, pero nosotras respondemos con una sonrisa, les agradecemos y seguimos adelante”, comenta Alvarado, quien también destaca el reconocimiento ciudadano que ha recibido el programa.
El esfuerzo de los Guardianes Viales se traduce en una mejor movilidad y mayor seguridad en los puntos de mayor tránsito. “Hemos recibido muchos agradecimientos con este nuevo programa. Cuando te lo reconocen, sientes satisfacción y haces tu trabajo con más ganas”, concluye Alvarado.
Con información de Karina Lomelí.



