- Diego “Azabache” Torres, Rafael “Divino” Espinoza y Noli Valenzuela coinciden que la trayectoria de Saúl Álvarez ha sido fundamental para fortalecer la imagen del boxeo mexicano.
Desde que Saúl “Canelo” Álvarez comenzó a llenar las arenas mexicanas y después los grandes escenarios estadounidenses, se marcó un antes y un después en la historia del boxeo mexicano.
Mientras el pelirrojo se apuntaba sus primeros grandes triunfos ante rivales como Miguel “Títere” Vázquez o Carlos Baldomir; o cuando se coronó por primera vez derrotando a Matthew Hatton, en los gimnasios de Jalisco, cientos de niños que lanzaban sus primeros golpes al costal y que soñaban con ser boxeadores, no lo perdieron de vista.
Entre ellos se encuentra Diego “Azabache” Torres, un pugilista zapopano de peso ligero y que ostenta un récord de 17 peleas y cero derrotas, con 16 nocauts.
“Empecé a ver sus peleas y me empezó a llamar la atención su manera de pegar tan sólida. Vi que fue creciendo físicamente y su manera de disciplinarse”, comentó.
Diego comenzó a practicar el deporte de los puños desde los seis años y recuerda que asistir a una función del “Canelo” como regalo de cumpleaños, fue determinante para visualizarse como profesional.
“Mi mamá me preguntó qué quería hacer para mi cumpleaños número 11, le dije que quería ver una pelea del ‘Canelo’, en el Auditorio Benito Juárez, y ahí fue cuando me hice súper fan”, agregó.
Otro caso similar es el de Rafael Espinoza, tapatío de 28 años y con un récord invicto de 20 triunfos, cero derrotas y 17 nocauts. Conocido como “El Divino”, confía en conseguir boletos para apoyar a Saúl el 6 de mayo en el Estadio Akron.
“Es una figura, nuestra representación mundialmente. La verdad mis respetos para él. Gracias a él se están dando estas funciones, este gran impacto en el boxeo de Jalisco”, comentó Espinoza.
De 19 años, oriundo de Chapala y con apenas tres peleas profesionales, Noli Valenzuela ya hace ruido en la categoría pluma o súper gallo.
Como amateur, consiguió para Jalisco dos platas y dos bronces en las Olimpiadas Nacionales y aunque sus ídolos son leyendas estadounidenses como Muhammad Ali y Floyd Mayweather, Noli reconoce la trayectoria de Álvarez como un ícono nacional.
“Muy importante, le abre la pauta a muchos boxeadores locales. Quizá mundial ya no, pero mexicano sí lo es”, concluyó.