Aprender a cuidarse, reconocer violencias normalizadas y romper con patrones aprendidos desde la infancia: ese fue el eje del taller “Construyendo Relaciones Saludables”, una capacitación diseñada especialmente para hombres que trabajan en el Centro de Prevención Social del Estado.
Durante 16 sesiones, un grupo diverso en edad y experiencia profesional, todos servidores públicos dedicados a la prevención de la violencia, reflexionó sobre cómo la configuración tradicional de la masculinidad impacta su vida personal y su desempeño laboral.
La formación, impartida por el OPD Servicios de Salud Jalisco, no solo abordó vínculos afectivos o familiares, sino también la relación que los hombres construyen consigo mismos. Uno de los hallazgos compartidos por los participantes fue el del autocuidado: desde acudir al médico hasta aprender a poner límites o expresar emociones.
“Los hombres no nos cuidamos”, fue una de las frases más repetidas en el taller. La capacitación permitió hacer una pausa en medio de la rutina institucional para identificar qué se necesita cambiar para vivir, trabajar y relacionarse de forma más consciente.
El ejercicio se inscribe en una estrategia del Consejo Estatal de Seguridad Pública para fortalecer el desempeño de sus equipos no solo con herramientas técnicas, sino con formación transversal que promueva un servicio público congruente, humano y libre de violencia.
La graduación del taller fue encabezada por autoridades del Consejo, quienes reconocieron el compromiso del grupo por participar en un proceso formativo que desafía estereotipos y apuesta por relaciones más igualitarias tanto dentro como fuera del ámbito laboral.
Este esfuerzo representa un paso más en la construcción de entornos seguros desde dentro del propio aparato estatal, donde los vínculos sanos también se aprenden y se practican.
