- La función de boxeo “The king is coming home” quedó enmarcada en la historia del deporte jalisciense, al mismo nivel de los Juegos Panamericanos e inolvidables partidos de fútbol en los mundiales.
Ha pasado una semana desde que Saúl “Canelo” Álvarez volvió a pelear en Jalisco tras 12 años de ausencia y en las calles, camiones, cafeterías, restaurantes y bares todavía se sigue hablando del inolvidable combate.
Y es que este evento ha quedado marcado en la historia del deporte jalisciense.
Más de un tapatío que pudo asistir a los mundiales que se disputaron en nuestro país, asegura que aquel partido entre Brasil y Francia, correspondiente a los cuartos de final de México 1986, ha sido uno de los más emocionantes de todos los tiempos.
Con goles de Careca y Michel Platini, ambas potencias empataron en el tiempo reglamentario y en los penales, Julio César estrelló su disparo en el poste y “la verdeamarelha”, gran candidato a quedar campeón, se despidió de la Copa del Mundo de aquella inolvidable tarde en el Estadio Jalisco.
Otro momento que sigue muy presente en la memoria de los jaliscienses fue cuando en el Estadio Akron se inauguraron los Juegos Panamericanos 2011, con un colorido excepcional encabezado por Vicente Fernández, Maná, Lila Downs y Alejandro Fernández.
Y en ese mismo inmueble, con un ambiente similar, la función “The King is coming home” fue un evento del que se hablará por varias décadas, debido al regreso de uno de los mejores boxeadores mexicanos de todos los tiempos.
Miles de jaliscienses quisieron ser parte del momento y hasta los mexicanos que radican en Estados Unidos, que han seguido al “Canelo” en Las Vegas, Texas y Nueva York, no dudaron en viajar hasta Guadalajara para unirse a esta fiesta.
Una entrada épica con mariachis que entonaron la mejor versión jamás interpretada de “El Tapatío”, y ya dentro del ring, la pelea ante John Ryder fue más dura de lo esperado y debieron disputarse los 12 rounds.
Cuando el peleador inglés cayó en el quinto episodio, el Akron vibró tan alto que parecía que se estaban coronando las Chivas. Otros boxeadores locales aprovecharon el escenario para demostrar sus cualidades y los aficionados de este deporte comiencen a seguirlos.
Gabriel Gollaz Valenzuela se lució con una pelea de alarido, en la cual una caída a favor fue determinante para derrotar por decisión dividida al australiano Steve Spark. También se presentaron Jesus Larios y Johansen Alvarez, sobrino de Saúl.
Futbolistas, actores y cantantes que están de moda también estuvieron en primera fila y desde que Beto Vega interpretó el Himno Nacional Mexicano, sabíamos que estábamos frente a un evento de clase mundial.
Por cierto, Beto Vega ya le ha cantado un par de corridos al Canelo, y es uno de sus mejores amigos. Ya en la rueda de prensa, el Potrillo confirmó que lo invitaron a entonar el Himno Nacional Mexicano, aunque por cuestiones de salud no pudo.
Más de 50 mil asistentes fueron testigos de un evento que tendrán que pasar muchos años para que se pueda igualar, y si ese día llega, más de un tapatío le dirá a las nuevas generaciones: “yo estuve presente el día que el rey Canelo regresó a Casa”.
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