- “La “Albiceleste” jugará contra Francia el domingo por la Copa del Mundo en busca de su tercer título; todo Argentina vive con el corazón palpitante.
Cada mundial, además de los cracks que surgen en sus barrios más humildes, los “hinchas” argentinos sorprenden al mundo con sus cánticos: la pasión de los argentinos por el fútbol se aprende desde la cuna y se agiganta con los años.
De acuerdo con el investigador y doctor en comunicación, Juan Branz, en Argentina el fútbol se construyó como parte de una sociabilidad posible, con el barrio a través de los clubes. Esa es su magnitud. Hay una memoria colectiva y personal compartida.
Este sentimiento, que ellos mismos describen como inexplicable, puede ser comprendido una vez que se conozcan estos cinco aspectos clave:
1) La primera pelota llegó a tierras pamperas a través del mar, a mediados del siglo 19 marineros británicos. Los pobladores de Buenos Aires llamaban “ingleses locos” a aquellos que practicaban ese extraño juego pronunciado con vocablos ingleses.
Al poco tiempo, además de los visitantes ingleses, llegaron galeses, escoceses e irlandeses, quienes fueron los encargados de fundar los primeros clubes de fútbol en las estaciones de ferrocarriles que construyeron.
Los criollos se adueñaron del balón y le cambiaron el predominio de la fuerza física por una impronta basada en la habilidad, el ingenio, la magia, la picardía, la astucia y el engaño. La Asociación de Fútbol Argentina (AFA) fue la primera que se creó en Sudamérica, en 1893, y la octava en el mundo.
2) La gente se identificó con ídolos que representaban ese estilo diferente y los primeros fueron Vicente Zito, Natalio Perinetti, Francisco Varallo y Luis Monti, quien encabezó una legión de argentinos nacionalizados italianos que dieron a Italia su primer campeonato del mundo en 1934.
Siguieron las generaciones de Ángel Labruna, José Manuel Moreno, Tucho Méndez, Amadeo Carrizo, Ubaldo Fillol, Daniel Passarella, Mario Kempes, René Housemann, Gabriel Batistuta y Román Riquelme.
Pero quien ascendió hasta el “olimpo” albiceleste fue Diego Maradona y ahora se le unió Lionel Messi.
“Messi entró como Diego en el corazón de los hinchas. Demostró tener dotes de caudillo con su hermosa arenga en el vestuario antes de ganar la Copa América en Brasil 2021. Además de ser el mejor jugador del mundo, es una gran persona, un tipo muy querible. Mucha gente está contenta por Argentina pero también por Messi. Los que dudaban, lo han incorporado a su corazón”, aseguró el historiador Felipe Pigna.
3) La mística de las hinchadas argentinas se ha contagiado en muchísimas gradas de todo el mundo y los hits argentinos se hicieron famosos en los Mundiales.
“Muchachos”, con música de la banda de ska La Mosca, para este Mundial, es cantado por 40 mil aficionados en Qatar y por millones en plazas, bares y parques de Argentina.
El escritor, profesor y periodista Ariel Scher lo definió la pertenencia a un club de la siguiente manera:
“Podemos citar al escritor Roberto Fontanarrosa, a quien escuché decir que una de las razones por las que el fútbol nos fascina es porque cuando un 4 (defensa central) de tu equipo saca un lateral es imposible que estés pensando que debés un mes de facturas de luz. El fútbol es un juego y es una identidad y cuando transcurre, no estás para otra cosa”.
4) La “Albiceleste” conquistó su primera Copa del Mundo en Argentina 1978 y la segunda en México 1986. Sin embargo también ha perdido tres finales: Uruguay 1930, Italia 1990 y Brasil 2014. Asimismo, ha ganado en 15 ocasiones la Copa América.
5) El Obelisco, localizado en medio de la avenida 9 de Julio, es emblema de Buenos Aires. Con 140 metros de ancho, la vía inaugurada en 1937 e inspirada en los Campos Elíseos de París invita a la concentración de personas.
El escritor Matías Bauso explicó que este espacio se convirtió en destino natural de encuentro de los aficionados durante el Mundial de 1978 en plena dictadura, cuando los partidos eran transmitidos en pantalla gigante y a color en los teatros de la aledaña calle Corrientes.