- Antes del gol de Maradona en 1986, en el mundial de Argentina 1978 Mario Kempes desvió el balón con la mano para evitar un gol polaco; no fue expulsado y minutos después marcó para darle el triunfo a su equipo.
Para el mundial de Argentina 1978, los locales se presentaron como uno de los favoritos para ser campeones, y no decepcionaron en el Grupo 1, considerado como el de la “muerte”.
Después de vencer 2-1 a Hungría y por idéntico marcador a Francia, cayeron 1-0 ante Italia, partido al cual llegaron ya clasificados y utilizaron suplentes.
En aquel mundial, los dos primeros lugares fueron integrados a otro par de grupos, también de cuatro integrantes, y el equipo líder accedió directamente a la final.
La “albiceleste” fue colocada en el Grupo B y primero debió enfrentarse a un rival que en la pasada edición le dio muchos dolores de cabeza: Polonia, escuadra que los derrotó 3-2 en Alemania 1974.
TE RECOMENDAMOS: CUANDO FUTBOLISTAS ARGENTINOS SOBORNARON A LOS POLACOS
Aquel 14 de junio, en el Estadio Gigante de Arroyito, en Rosario, Mario Kempes tuvo un partido inolvidable.
Debido a que se fue sin anotaciones en la primera ronda, sus compañeros le sugirieron afeitarse el bigote para terminar con la mala suerte y la “cábala” funcionó, ya que abrió el marcador al minuto 16.
Al estar en desventaja, los polacos pisaron el acelerador y acecharon constantemente el arco local y en una mala salida del portero Ubaldo FIllol, el goleador europeo Grzegorz Lato remató de cabeza y cuando parecía que llegaba el empate, desde la línea el “Matador” Kempes se lanzó de forma espectacular y sacó el balón, ¡pero con la mano!
Aunque el árbitro sueco Ulf Eriksson sancionó el penal, en aquel entonces este tipo de faltas ni siquiera ameritaban una amonestación, ya que cabe resaltar que el de Argentina 74, fue apenas el segundo mundial donde los silbantes utilizaron de manera oficial las tarjetas.
Cuando mejor jugaban, los polacos no pudieron empatar el marcador.
Fillol supo enmendar su error y adivinó el disparo del capitán polaco Kazimierz Deyna y minutos después, el propio Kempes anotó el 2-0 definitivo.
En el siguiente partido, los argentinos empataron sin goles con Brasil y la goleada de 6-0 ante Perú, uno de los partidos más polémicos en la historia de los mundiales, les dio el pase a la Final, donde derrotaron 3-1 a Holanda.
El “Matador” fue el último argentino en conseguir la Bota de Oro en un Mundial.
El “Matador” anotó otro par de dobletes a peruanos y holandeses y, con seis goles, terminó como goleador de aquel mundial en el que su país se coronó por primera vez.
